6/4/09

Caballeros.



"Nuestro rey había muerto sin determinar cual de sus 4 hijos seria el sucesor al trono. Y mas allá de las grandes murallas exteriores, a mas de 30 kilómetros del castillo real, se encontraba el mal invasor. Aquellos engendros, deformes, malvados y ansiosos de invadirnos los habían y se preparaban para un dar un duro golpe.
Ya habían sepultado con sus ataques dos civilizaciones al sur de nuestra posición y al suroeste. Envenenado a sus victimas, trasnformándolos en esas...cosas. Eran el resultado de nuestra falta de fe, de nuestro abandono a el progreso, al belicismo de nuestras almas, el resultado de nuestras mentes asesinas o nuestro cerramiento a una fe extremista.

Yo, sacerdote de nuestro poblado, viejo amigo del rey, conocedor de tantos saberes, métodos de curación, de tantas personas y secretos, me temo que he de dejar en este viejo manuscrito, en el final de todo, un relato de lo que fue.

Yo fui soldado a las ordenes del rey Albert VI, hasta su defunción. Luche en tantísimas batallas, tenia unos amigos, compañeros en el fragor de aquella muerte que se convirtió ganar terreno a el mal invasor.

Uno de aquellos amigos, era el joven príncipe Willfred, que después se convirtió en el rey Wilfred II. Luchaba con devoción, mas de la que se lo podría pedir a un príncipe. Yo le vi muchas veces salvar a muchos de mis compañeros, por eso su padre le eligió como sucesor.

Otro de estos amigos, era un soldado muy bravo, valiente y fuerte, que tras muchos años luchando en innumerables batallas, se convirtió en el general de los ejércitos defensores de la ciudadela, el mayor cargo militar. Y, gracias a su valentía y dedicación estratégica, hemos sobrevivido a miles de ataques.

El ter de estos amigos, era un joven, que manejaba de manera menos agraciada la espada, pero que usaba mas el intelecto, eso le valió el titulo de "el estudiante". y con el paso de los años, tras retirarse del servicio militar para el estudio y labores menos militares, se convirtió en el sacerdote de esta ciudad, osease, yo.

Pero de nada sirve eso ahora, el rey murió, tras el ataque de un asesino de la ciudad que se encuentra a unos 100 Km de nuestra población. Así una vez destruidos, ellos tomarán las tierras con todos nuestros hogares, tras matar a los pocos engendros que queden. pues son solo eso una plaga que intenta erradicarnos.

Pero, solo unos pocos sabemos la verdad, y s hora de revelarla, el rey y todos sus antecesores, dejaron escrito que si moría el regente antes de haber decidido quien seria su sucesor, el sacerdote, tendria que ir con una pequeña escolta al sur, lo mas al sur que ningún hombre allá llegado. Ir a la primera ciudad, que fue destruida por que el mal se creo dentro de sus propios muros. Allí descansa el cuerpo del rey Vlar I el maldito. Y junto a el, esta sus espada. solo el autentico rey podrá coger esa espada, pues su peso es descomunal, pero varia y se hace ligera como una pluma solo para el autentico rey.

Así pues, partiremos un pequeño contingente, dos escuadrones de soldados de la espada, uno de arqueros largos, otro de lanceros de la ciudadela, uno de caballeros del rey, el general de los ejércitos defensores de la ciudadela, mi viejo amigo, dos pupilos del sacerdote, el sacerdote, yo mismo, y los pretendientes al trono. Además de tres carros con provisiones para tan largo viaje, que sera de al menos un mes, si no encontramos problemas,cosa que sera muy probable q encontremos, pues vamos hacia territorio conquistado por estos malditos. Que los dioses nos guíen, que el cielo nos guarde y la maldición no nos invada."


Sacerdote de la ciudadela azul, aposentos de la catedral. dia 1 del viaje.

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