Me siento en mi elemento. Regado de cientos de energías, de cientos de fuerzas. Maleado por los vientos químicos de el magnetismo, por cintos de corrientes ajenas a mi. Unido a elementos a los que soy necesario, pero que cualquiera seria valido para dicha unión.
Reacciones químicas, reacciones en mi mente acortan los minutos, acortan y saltan. Un momento de calma, y cientos de choques, cientos de descargas de estallidos potentes, de furia incontrolable, de vida permanente. En mi, un simple átomo en una ecuación, una pieza de un puzle inmensamente grande, una minúscula mota de polvo en la inmensidad, nace dicha energía. De dentro de los confines de mi ser, nace todo. De mi mente, de mi espíritu, mueven mi cuerpo, me hacen gritar mis ideas. Expandir una energía capaz de tirar muros, aplastar y aplanar montañas, diluir el cristal mas puro y solidificar cualquier vapor. ¿Por qué no?
Solo hace falta imaginación. la imaginación mueve continentes, hace que exista gravedad, hace que los poemas estén en nuestros corazones, y que la música de ritmo a nuestro corazón.
Soy un átomo de imaginación. Solo hace falta una pequeña descarga, y empieza la reacción en cadena.
1 comentario:
quedaría bien un
Du
en la tabla periódica XD
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