16/9/07

I feel the red fox.

Vi esta noche algo en mi ventana. Se poso sigiloso, cual caballero majestuoso, un pequeño ave. Era de color blanco como las nubes, y su pico de color amarillo como el mismísimo sol. En sus garras llevaba una ramita. Pequeña, poseía una sola hoja verde. Era una rama de roble. Dejo la carga de sus patas, y marcho con el mismo vuelo que había traído su cuerpecillo hasta mi alfeizar.

Me calce mis pies, con las viejas zapatillas, y levante mi, en ese momento, perezoso cuerpo. Según me acerque a la venta vi que la hoja estaba mojada. Tenía pequeñas gotitas del roció.
Al mirar esas gotas a través me pareció soñar. En ellas se veía un hermoso paisaje. Un bosque inmenso, y exuberante en la ladera de una enorme montaña. Parecía que estuviese dentro del paisaje. Los animales volaban por el, pájaros, ciervos, peces en sus lagunas. Pero en medio de un claro, mirándome había un animal. Pequeño pero que imponía por su figura. Trasmitía tanto solo con sus profundos ojos, que tarde en darme cuenta que era un zorro. Se acerco a donde yo estaba, lo tenía casi cara con cara, no sabia que podía pasar. ¿Me atacaría? ¿Pasaría de largo?
Entonces, cuando su hocico rozo mi nariz, un vuelco al corazón me hizo abrir los ojos. Estaba empapado en sudor, en mi cama y ya era día abierto. Había soñado aquello, era lógico. Pero entonces recordé cada uno de todos los detalles de aquello. Era como si, en vez de soñarlo, lo hubiese vivido. Entonces me levante y me preparare para salir. No se si fue un sueño o que pero… ¿acaso importa?

No hay comentarios: