"No se por que hoy volví abrirlo. No se porque hoy, no es una fecha señalada, no es un aniversario de nada.
Si, volví a ver alguna vieja foto, los dos sonreíamos, éramos felices. Si al verla llore, porque aun me duele ver la diferencia de luz a la oscuridad entre nosotros. Si la vida fuese como en las películas, hubiese sonado alguna canción de las que dijimos nuestras, una balada que arrancase la tristeza a mi corazón. Pero esto no es una película, aquí no hay final feliz, tu en su momento me lo recordaste. Cerré los ojos y deje las viejas fotografías.
Corrí por el pasillo del comedor, salí de mi casa y me dirigí a la puerta de tu hogar. “Hola, Maria. Soy yo otra vez” tu saliste, pero no sola. El acompañaba tus movimientos abrazando tu cuerpo. Recuerdo aquel día, llegue demasiado pronto a nuestra cita. Vuestras bocas se enredaban en un profundo beso. Dijiste que me ibas a dejar ese día, dijiste que me habías querido, dijiste tantas cosas. Yo me marche.
Camine durante días, meses. Viví aprendí a no llorar pensando en ti, aprendí a odiarte. Y hoy volví a ver las viejas fotografías.
El es alto, es mas guapo y eres mas feliz con el, nadie podría negar eso. Pero lo nuestro lo tiraste por un retrete, me despreciaste, y todo lo que te regale lo guardaste en una caja, y jamás volviste a abrirla. Ahora te digo que la abras, tu no sabes que hacer, entonces saco mi vieja pistola, y te digo que lo hagas, delante de mi, apuntándome a la sien.
Abres la caja, y empiezas a pasar por anillos, pulseras fotografías y tantos otros recuerdos de entonces. Y, de tus asustados ojos salen unas lágrimas, no son de miedo, no. Lloras por lo que ves, por el desprecio que hiciste, no solo a mi, pues en esa caja blanca están las fotos de todos los chicos que juraste amar, y que te quitaste como si fuesen manchas para conseguir otro.
Alzas la vista y me pides perdón, que lo sientes. Nada de eso importa. Pego un tiro al aire y tú gritas y tu hombre se agacha. Te tiro el arma a tus pies, saco mi cámara y te hago una última foto, no volverás a atormentar mis sueños pequeña víbora. Ahora sabes que clase de hombre tienes delante, ahora el sabe como de arpía eres, y ahora sabes, que el desprecio que me hiciste a mi y a los anteriores a mi, te será devuelto. Quedaras sola, con tus recuerdos, llorando para siempre sola. Adiós mi conejito, dice tu chico mientras se viste y marcha.
Adiós mi dulce Maria, siempre guardare un recuerdo de ti… ¿y tu?
Once upon a time…Last monkey loved…"
No hay comentarios:
Publicar un comentario